El 21 de agosto de 2025, el Parlamento de India aprobó el Proyecto de Ley de Promoción y Regulación de Juegos en Línea, una normativa que prohibió de manera inmediata todos los juegos de azar en línea con dinero real en el país. Tres días después, la presidenta Droupadi Murmu promulgó la ley, cerrando así un sector que hasta ese momento operaba con reconocimiento gubernamental.
La legislación restringe cualquier aplicación o plataforma que ofrezca juegos de azar o servicios relacionados con dinero real, sin hacer distinción entre juegos de azar puro y aquellos que requieren habilidad, como el póker, el rummy o los deportes de fantasía. Al mismo tiempo, la ley promueve activamente los deportes electrónicos, los juegos educativos y los sociales.
Sin embargo, tres meses después de su aprobación, el gobierno todavía no ha emitido la notificación oficial que autoriza la aplicación de estas medidas. La ley contempla multas de hasta 210 millones de rupias (113.000 dólares) y penas de hasta tres años de cárcel para los infractores. Las celebridades e influencers que promocionen estos juegos también podrían enfrentar cargos penales, aunque los usuarios quedan exentos de castigo.
Argumentos a favor y en contra de la prohibición en India
El ministro de Tecnología de la India, Ashwini Vaishnaw, defendió la prohibición al afirmar que las plataformas de apuestas deportivas «explotan a los usuarios con falsas promesas de ganancias». Según Vaishnaw, la ley «evita un gran mal que se está infiltrando en la sociedad», haciendo referencia a los riesgos asociados al juego, como las pérdidas financieras y los daños psicológicos.
Sin embargo, los críticos argumentan que la medida resulta contraproducente. Jaya Chahar, fundadora y directora ejecutiva de JCDC Sports, declaró que prohibir la industria legal no frenará las apuestas en línea. Por el contrario, esto «desvía la participación de los aficionados de las plataformas indias reguladas hacia espacios extraterritoriales no regulados, lo cual contradice el propósito mismo de la protección del consumidor».
Smrita Singh Chandra, exresponsable de comunicación de Dream11, criticó duramente la forma en que se implementó la prohibición. «Declarar ilegal una plataforma después de años de validación, tributación y reconocimiento judicial no solo es incorrecto», escribió. «Es profundamente inmoral». Chandra se sumó a otros críticos al señalar que la medida se introdujo sin transición, matices ni consideración de la realidad económica.
El costo económico de la prohibición de las apuestas en línea
Las pérdidas económicas no se han hecho esperar. En los primeros 90 días desde la prohibición, las plataformas de juegos en línea han registrado pérdidas de activos por más de 840 millones de dólares, según reportó el Economic Times.
La empresa estadounidense Flutter Entertainment registró un deterioro de activos de 556 millones de dólares tras cerrar su filial india, Junglee Games. La firma canadiense de capital privado Clairvest Group amortizó su inversión en Head Digital Works, operadora de A23 Rummy. La empresa india Nazara Technologies registró una pérdida por deterioro de 103,2 millones de dólares en su inversión en Moonshine Technologies, matriz de PokerBaazi. Por su parte, la fintech Paytm registró una pérdida neta del 98% tras contabilizar un deterioro de 21,4 millones de dólares en un préstamo a First Games Technology.
El impacto laboral también ha sido significativo: cerca de 7.000 trabajadores indios han perdido sus empleos en este período.
Incertidumbre regulatoria en India
El abogado especializado en medios y tecnología, Probir Roy Chowdhury, advirtió que la prohibición podría tener un efecto disuasorio sobre la inversión extranjera. «Este drástico cambio de política abandona el plan inicial del gobierno para la autorregulación del sector», afirmó. «Un giro tan radical transmite a los inversores la impresión de que el gobierno puede desmantelar arbitrariamente un sector próspero, generando un importante riesgo regulatorio».
Antes de la prohibición, la industria aportaba aproximadamente 20.000 millones de rupias (42.256 millones de dólares) anuales en impuestos directos e indirectos, además de generar cerca de 20.000 empleos directos e indirectos.
De cara al futuro, India planea enfocarse en los deportes electrónicos y los juegos sociales en línea cuyo resultado esté determinado por habilidades como la destreza física, la agilidad mental o el pensamiento estratégico.












