Japón se prepara para retomar una de las apuestas económicas más audaces de su historia reciente: el desarrollo de resorts integrados (IR), complejos turísticos que combinan casinos, hoteles de lujo, centros de convenciones y entretenimiento. Aunque la Ley de Promoción de Resorts Integrados se aprobó en 2018, hasta ahora solo se ha adjudicado una licencia, para Osaka, con el gigante MGM al frente, dejando dos vacantes que podrían redefinir el mapa turístico del país.
En una coyuntura marcada por la recuperación postpandemia y la presión competitiva regional, el gobierno japonés ha confirmado que abrirá una nueva convocatoria de licitación en 2026, reactivando el entusiasmo de prefecturas interesadas y de operadores internacionales.
Un solo proyecto en marcha: Osaka, la gran apuesta
El único proyecto aprobado hasta ahora es el de Osaka, liderado por MGM Resorts y su socio Orix Corporation. Con una inversión estimada en 8.9 mil millones de dólares, este IR se ubicará en Yumeshima, una isla artificial en la bahía de Osaka, y prevé su apertura en 2030.
El éxito de este megaproyecto es visto como una prueba de fuego: si funciona, abrirá la puerta para nuevos desarrollos en otras regiones. Si falla, podría enfriar el interés de inversores y autoridades locales.
Prefecturas en juego: ¿quién levantará la mano?
La nueva ronda de licitación podría atraer a prefecturas que en su momento mostraron interés, pero se retiraron o fueron descalificadas. Wakayama, por ejemplo, abandonó su postulación anterior tras cuestionamientos sobre el financiamiento del consorcio privado. Sin embargo, sus autoridades ya han manifestado que podrían volver al ruedo si el proceso se reinicia.
Hokkaido es otra posible candidata. Aunque desistió en 2019 citando preocupaciones medioambientales, el panorama podría cambiar si se rediseñan los criterios o se presentan nuevos actores. Otras regiones como Nagasaki o Fukuoka también han sido mencionadas en el pasado.
En cambio, Yokohama, una de las favoritas en la primera fase, parece fuera de juego. El rechazo político al proyecto, encabezado por su actual alcaldesa, truncó las aspiraciones del consorcio liderado por Genting Singapore.
Un modelo económico ambicioso, pero no exento de riesgos
El modelo japonés de resorts integrados busca mucho más que casinos. Se enfoca en el turismo internacional, los viajes de negocios, y el desarrollo regional. No obstante, también enfrenta críticas desde sectores sociales y políticos que alertan sobre los riesgos del juego patológico, el lavado de dinero y el posible impacto cultural.
Por ello, las autoridades insisten en que el modelo japonés tendrá un control estricto, con fuertes regulaciones, sistemas de entrada limitados para ciudadanos locales y programas de juego responsable. La meta es atraer a turistas extranjeros y minimizar los riesgos internos.
2026 será un año clave para el futuro del juego en Japón
La reapertura del proceso de licitación para resorts integrados marca una nueva fase para Japón. El país quiere posicionarse como un referente del turismo de entretenimiento en Asia, pero para lograrlo deberá competir con gigantes emergentes, mantener la confianza de los inversores y demostrar que puede equilibrar desarrollo económico con responsabilidad social.
Las cartas están sobre la mesa. Ahora, la pregunta es: ¿quién se atreverá a jugarlas?